[Foto: Composición RS/El Comercio, Portal Extra]
Durante lo que va del año se han registrado 490 homicidios en el país, con un promedio de seis asesinatos diarios.
El panorama de la seguridad en el país continúa deteriorándose, según las cifras que revelan que, hasta la fecha, se han registrado 490 homicidios en 2025, lo que equivale a un promedio aproximado de seis muertes diarias. De estos casos, se ha determinado que el 72% fueron ejecutados con armas de fuego, lo que resalta una tendencia alarmante en el uso letal de este tipo de armamento. Las regiones que concentran la mayor cantidad de víctimas son Lima, Callao y La Libertad, zonas que se han convertido en epicentros de la violencia.
Además de los homicidios a balazos, las autoridades han documentado 23 asesinatos cometidos con arma blanca, 18 por asfixia y 89 utilizando otros métodos, lo que indica que, aunque la violencia armada predomina, existen otras formas de ejecuciones que también afectan a la ciudadanía. La diversidad de métodos empleados refleja la complejidad del fenómeno criminal y la urgente necesidad de fortalecer las estrategias de seguridad y prevención.
El caso del asesinato de Paul Flores, conocido como “Russo” y miembro de la agrupación Armonía 10, ha impactado particularmente a la opinión pública. Según los informes, el músico fue blanco de dos disparos mientras se desplazaba en un bus entre Jicamarca y Santa Clara durante la madrugada del último domingo, lo que se suma a la creciente ola delictiva y el clima de inseguridad que vive el país. Este lamentable suceso se enmarca en una serie de hechos que evidencian la expansión del crimen, el cual ya ha cruzado los límites de las calles y ha penetrado incluso en espacios tradicionalmente seguros, como los hogares de las víctimas.
La situación ha generado además una fuerte reacción en el ámbito político. Con 78 votos a favor, el Congreso de la República censuró al ministro del Interior, Juan José Santiváñez, en respuesta a la crisis de seguridad que ha llevado a una disminución en los resultados policiales en comparación con el año anterior. Durante el debate parlamentario, Santiváñez presentó cifras sobre operativos y detenidos, sin embargo, dichas estadísticas no fueron suficientes para contrarrestar la creciente preocupación ciudadana y la percepción de ineficiencia en el manejo de la inseguridad.
El clima de tensión se ha visto reforzado por la confluencia de estos hechos: la violencia en las calles, el uso desmedido de armas de fuego en la ejecución de homicidios y la inestabilidad política generada por la censura al titular del Ministerio del Interior. Estas circunstancias evidencian que el fenómeno delictivo ha evolucionado de forma compleja, abarcando desde ataques en espacios públicos hasta situaciones de riesgo en domicilios particulares, lo que obliga a las autoridades a replantear sus estrategias de intervención.
Ante este escenario, expertos y analistas en seguridad coinciden en la necesidad de adoptar medidas integrales que no solo se centren en el incremento de operativos, sino también en la prevención y en la mejora de la coordinación entre las instituciones encargadas de la seguridad ciudadana. La prioridad, afirman, debe ser reducir la disponibilidad de armas y fortalecer los mecanismos de inteligencia que permitan anticipar y frenar la acción de las bandas criminales.
En conclusión, el hecho de que el 72% de los homicidios en 2025 hayan sido ejecutados con armas de fuego subraya la urgencia de abordar la crisis de inseguridad con medidas contundentes y coordinadas, que permitan recuperar la confianza de la ciudadanía y garantizar el derecho a una vida en paz.
RADIO SENTIMIENTO
Redactado por Nora Gutierrez